No hablar demasiado alto. No expresarse en un tono demasiado categórico.
No sentarse con las piernas abiertas. No reírse demasiado fuerte.
Charlar es femenino, no los grandes discursos
sino las cosas pequeñas. Las monadas.
No digo que ser "una mujer" sea en sí mismo una obligación horrible.
Las hay que lo hacen muy bien.
Lo que resulta degradante es el hecho de que sea una obligación.
Hacer patinaje artístico es también muy bonito.
Y, sin embargo, no nos exigen a todas que seamos patinadoras.
Montar a caballo también tiene su punto.
Y, sin embargo, no te dan una silla y un caballo nada más nacer.
Virginie Despentes
de su libro Teoría King Kong
"... para afuera soy todo lo que digan y más, y eso es lo único que podrán ver de mí,
mi carcasa, no necesitan hacer más análisis para comprender su diminuta realidad,
limpia y ordenada como un pasillo de IKEA.
Luego, aquí dentro, yo sé muy bien lo que soy, y lo que significa para mí ser mujer"
Diana J.Torres
de su libro Pornoterrorismo
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